Los hombres de Juan Carlos Lezcano fueron los únicos que vencieron en Vallecas durante el curso 1977/78.
La Liga española está llena de historias sorprendentes y el conjunto de la barriada de Vallecas protagonizó una de ellas hace ahora 43 años. El conjunto entrenado por el uruguayo Héctor Núñez sumaba 17 partidos consecutivos como local invicto. La proeza era de mayor calibre ya que se trataba del debut en Primera División del conjunto madrileño.
En el estadio de Vallecas cayeron derrotados esa temporada Racing de Santander, Sevilla, Real Madrid, Sporting de Gijón, Athletic Club, Valencia, Betis, Atlético de Madrid, Cádiz y Hércules y solo consiguieron empatar Las Palmas, Salamanca y R.C.D. Espanyol.
El Elche C.F. visitaba Vallecas en el antepenúltimo partido de los madrileños en su estadio. Después lo harían Real Sociedad y Barcelona. Todo apuntaba a que los ilicitanos, en puestos de descenso, no serían quienes aguarán aquel registro de ensueño en el debut de los rayistas en la élite.
El 2 de abril de 1978 amaneció soleado, pero a la hora del partido fuertes rachas de viento presagiaban, como así ocurriría, una mañana de fútbol poco vistoso.
El dominio de los locales era testimonial. El once rayista movía el balón a su antojo sin demasiada profundidad para desesperación de la grada, que veía ante los ilicitanos la oportunidad de sumar dos puntos que le mantuviera en la sexta posición de la tabla y por lo tanto seguir optando a disputar competiciones europeas la temporada siguiente.
Juan Carlos Lezcano, que había sustituido en el cargo la semana anterior a Roque Olsen, planteó un partido con el equipo arropado atrás a la espera de acontecimientos.
El partido se fue convirtiendo con el paso de los minutos en un encefalograma plano y la única ocasión clara fue del lado franjiverde en un gol anulado por fuera de juego.
Tras el descanso el guión apenas cambió y no sería hasta el minuto 70, cuando Antón robó un balón en la medular y tras irse de Anero, ponía un centro medido al corazón del área que Mario Finarolli remataba de cabeza al fondo de la red.
A la conclusión del partido el conjunto franjiverde se conjuraba en el centro del campo. Las sensaciones sobre el césped eran totalmente opuestas en cada uno de los equipos. Los madrileños sufrían la que sería su única derrota en casa de la temporada. Los ilicitanos celebraron la que sería la única victoria del curso a domicilio.
A falta de seis partidos para la conclusión de la temporada, la situación del equipo era muy difícil en la tabla, pero aquella victoria dio mucha moral al equipo.
Antes de acabar la temporada por el estadio de Vallecas pasaron Real Sociedad y Barcelona. La historia se repetía y vascos y catalanes caían derrotados. Además, en el torneo de Copa, U.D. Montijo, A.P. Almansa y Recreativo de Huelva tampoco fueron capaces de derrotar al Rayo Vallecano.
Con aquella victoria el Elche C.F. conseguía aquella tarde la primera victoria en Primera División, en tierras madrileñas, después de disputar 35 partidos, siendo la Comunidad de Madrid la única que hasta la fecha se le había resistido.
Antonio J. Pamies
Área de Historia del Elche C.F.
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