En una mañana lluviosa en Petrer, Alicante, un bebé de 18 meses fue encontrado descalzo, solo y en pañales por un vecino, quien inmediatamente alertó a la Policía Local. El menor, hallado antes de las ocho de la mañana, estaba desorientado y llorando bajo condiciones climáticas adversas.
Los agentes respondieron al aviso y se encargaron del niño, que fue protegido y abrigado en el vehículo del ciudadano que reportó el incidente. Con ayuda de gestos, el menor pudo guiar a la policía hasta su domicilio, donde encontraron a su madre. Esta explicó que había dejado al niño al cuidado de otra persona mientras llevaba al padre a su trabajo, sin saber cómo el pequeño pudo salir de la casa.
Temporalmente, el bebé ha sido dejado bajo el cuidado de su abuela materna mientras se esclarece la situación y se determina la responsabilidad de los padres en este descuido. Este incidente ha suscitado preocupación en la comunidad y resalta la importancia de la vigilancia y el cuidado infantil.
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